El mundo del boxeo se encuentra expectante tras el reciente anuncio de Mauricio Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo (CMB). Durante la 63ª Convención Anual celebrada en la vibrante ciudad de Bangkok, Sulaimán confirmó la desclasificación de Terence Crawford como campeón supermediano, perdiendo así su codiciado título de monarca indiscutido.
Esta drástica medida responde a la falta de cumplimiento por parte del púgil de abonar las cuotas correspondientes a sus dos combates más recientes. Dicho requisito es fundamental y está claramente estipulado dentro de las normativas vigentes de la prestigiosa organización boxística.
Recordemos que Terence Crawford alcanzó la gloria como Monarca Mundial Supermedio del CMB el pasado 13 de septiembre. Fue tras un combate épico contra el icónico Saúl “Canelo” Álvarez, donde no solo puso en juego el cinturón del CMB, sino también los de la OMB, FIB y AMB, unificando así todos los títulos y coronándose campeón indiscutido del boxeo en la división supermediana.
El propio Mauricio Sulaimán destacó la considerable suma de dinero que Crawford percibió por su enfrentamiento con Canelo. Ante esta situación, el CMB demostró su flexibilidad y compromiso, ofreciendo una significativa exención en la tarifa obligatoria. La cuota, que usualmente asciende al 3%, fue reducida drásticamente a tan solo un 0.6% para el boxeador.
El CMB Agota la Paciencia: Intentos de Contacto con Terence Crawford Sin Éxito
A pesar de los esfuerzos y la considerable concesión, la completa ausencia de respuesta por parte del campeón Crawford terminó por agotar la paciencia del CMB. Ante este escenario, la Junta de Gobierno de la organización tomó la difícil, pero necesaria, determinación de declarar vacante el título supermediano. Esta decisión no solo reconfigura el panorama de la élite en esta apasionante división, sino que también marca el inicio de una nueva era para los aspirantes al trono.
El Consejo Mundial de Boxeo confirmó haber dirigido múltiples comunicaciones a Terence Crawford, incluyendo a su mánager y su representante legal. Lamentablemente, la organización no recibió ni el más mínimo acuse de recibo, ni ninguna forma de respuesta a sus intentos de diálogo. Ante esta falta de comunicación, el CMB se vio en la obligación de proceder, basándose en la premisa de que el campeón Crawford había sido debidamente notificado y se le habían ofrecido diversas oportunidades para solventar la situación y mantener su estatus.
OdL
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