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Un año después de la devastadora tragedia, Valencia se une en un emotivo homenaje. La Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia fue el escenario donde Sus Majestades los Reyes de España, Don Felipe y Doña Letizia, presidieron una solemne ceremonia. El acto rindió tributo a las 237 vidas perdidas a causa de las terribles inundaciones que azotaron no solo Valencia, sino también otras provincias españolas como Cuenca, Albacete y Málaga.
Las secuelas de aquel desastre natural fueron devastadoras: más de dos mil 600 heridos, 300 mil personas afectadas, cerca de 30 mil edificaciones destruidas, 800 kilómetros de carreteras dañadas y serios perjuicios en la red ferroviaria nacional.
La ceremonia contó con la presencia de familiares de las víctimas, el Presidente del Gobierno de España, miembros de su gabinete, así como destacadas autoridades regionales y locales, todos unidos en recuerdo y solidaridad.
En la previa al homenaje, surgió un momento de palpable tensión. Algunos de los afectados señalaron al presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, por presunta inacción, debido a que se encontraba en un almuerzo durante las horas más críticas de la catástrofe.

Un Legado de Memoria: El Rey Felipe VI Honra a las Víctimas de la Tragedia de 2024
Las puertas del evento se abrieron con consignas reclamando responsabilidades, mientras los centenares de familiares presentes sostenían con fuerza las fotografías de sus seres queridos, un testimonio visible del dolor y la pérdida.
El tributo, cargado de profunda solemnidad, inició con la resonante interpretación del himno nacional de España. Acto seguido, se nombró a cada una de las 237 víctimas. En un gesto simbólico y conmovedor, por cada nombre pronunciado, se depositó una rosa blanca sobre un imponente arreglo floral en el corazón del Museo de las Ciencias de Valencia.
Sus Majestades los Reyes también hicieron entrega de una ofrenda floral, un momento de profunda emoción acompañado por la delicada melodía de “El canto de los pájaros”. La atmósfera fue enriquecida por diversas piezas musicales, cuidadosamente seleccionadas para realzar la solemnidad de la ocasión.
Este homenaje, concebido como un acto de carácter laico y de voluntad popular, contó con las intervenciones de tres mujeres. Ellas hablaron en nombre de los familiares de las víctimas, elevando la memoria de quienes ya no están y expresando sincera gratitud a los miles de trabajadores y colaboradores cuya invaluable ayuda fue crucial en las tareas de rescate durante aquellos difíciles días de finales de octubre de 2024.
Tras sus emotivas palabras, se guardó un minuto de respetuoso silencio en memoria de los fallecidos.
El Rey Felipe VI cerró la ceremonia con un mensaje cargado de significado y reflexión:
Hoy rendimos homenaje primordialmente a las víctimas, ya que cada nombre, cada vivencia, cada individuo forma parte de nuestra memoria colectiva. Ellas constituyen la esencia, el sentir y el propósito de esta conmemoración. He buscado las expresiones adecuadas, pero ninguna puede encapsular completamente el sentir al tener que expresarlas”, declaró el monarca. Asimismo, enfatizó la importancia de extraer lecciones de esta tragedia con diligencia y ecuanimidad, con el fin de optimizar nuestra preparación ante futuras calamidades y fortalecer nuestra resiliencia colectiva.
El cierre de este sentido reconocimiento colectivo, un año después del trágico 29 de octubre, estuvo marcado por la sublime interpretación del Adagio del Concierto de Aranjuez, una pieza que resonó en el alma de todos los presentes.
aDB


