La NASA, reconocida agencia aeroespacial estadounidense, ha iniciado el despliegue de su vital Protocolo de Salvaguarda Planetaria. Esta medida se ha tomado en respuesta directa a la detección y seguimiento del fascinante cuerpo celeste 3I Atlas. Este enigmático cometa, cuyo origen aún se mantiene en el misterio, parece tener una conexión inesperada con una célebre profecía de la vidente búlgara Baba Vanga, la cual apuntaba al año 2025.
Recientemente, la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de EE. UU. ha comunicado oficialmente la activación de este crucial protocolo. El seguimiento exhaustivo del trayecto del cometa 3I Atlas es ahora una prioridad. Este objeto espacial ha generado considerable inquietud y atención, no solo por la significativa proximidad que se prevé alcanzará a la Tierra durante su aproximación, sino también por la profunda incertidumbre que rodea su origen.
El renombrado astrofísico Avi Loeb, quien lidera el Instituto de Teoría y Computación en la prestigiosa Universidad de Harvard, ha expresado su firme convicción de que el 3I Atlas podría tener un origen no terrestre. Sus argumentos se basan en características únicas del objeto que, según él, lo diferencian de los cometas convencionales. Sin embargo, la NASA ha presentado su perspectiva oficial, la cual hasta el momento diverge de esta audaz hipótesis.
Protocolo de Salvaguarda Planetaria de la NASA: Activación ante el Cometa 3I Atlas
El Protocolo de Salvaguarda Planetaria es el conjunto de procedimientos y metodologías diseñadas para la meticulosa vigilancia y la rigurosa evaluación de objetos próximos a la Tierra. Su objetivo primordial es identificar y analizar cualquier cuerpo celeste que pudiera presentar un potencial peligro para nuestro planeta. Este protocolo es una pieza clave dentro de las operaciones de la Red Internacional de Advertencia de Asteroides (IAWN), que se encarga de recopilar y compartir información vital sobre las rutas y las características intrínsecas de los cuerpos celestes para asegurar la máxima precisión en su seguimiento y predicción.

A pesar de que la NASA ha clarificado que el cometa 3I Atlas no representa una amenaza de impacto directo contra nuestro planeta, la activación del protocolo de salvaguarda planetaria permitirá a la agencia recopilar datos mucho más detallados. El fin es obtener una comprensión profunda y precisa de la trayectoria específica de este fascinante objeto interestelar. Aunque las dimensiones exactas del cometa aún se están determinando, la agencia espacial ha proporcionado datos preliminares clave:
“Los astrónomos continúan trabajando para determinar el tamaño exacto del 3I/ATLAS. Sin embargo, a través de observaciones realizadas con el Telescopio Espacial Hubble el pasado 20 de agosto de 2025, se ha podido establecer que el diámetro de su núcleo se encuentra en un rango de entre 440 metros como mínimo y hasta 5.6 kilómetros como máximo”, comunicó oficialmente la NASA.
Baba Vanga y la Profecía del 2025: ¿Se Cierra el Círculo?
La influyente vidente búlgara Baba Vanga, cuyas predicciones han sido objeto de estudio y asombro durante décadas, anticipó para el año 2025 la ocurrencia de eventos de proporciones épicas y potencialmente catastróficas. Entre sus visiones destacaban importantes enfrentamientos bélicos, haciendo eco de las tensiones globales actuales como las observadas en Ucrania y la Franja de Gaza, y, de manera aún más intrigante, el anuncio del primer contacto de la humanidad con vida de origen extraterrestre.
Según los detalles de la profecía de Vanga, transmitidos fielmente por su sobrina Krasimira Stoyanova, quien se encargó de difundir sus notables visiones, este trascendental encuentro entre la humanidad y civilizaciones de otros mundos se produciría en el marco de un acontecimiento deportivo de relevancia mundial programado para el año 2025. La propia vidente habría dejado constancia de esta asombrosa predicción:
“Una nueva luz celestial se manifestará durante un importante evento deportivo, y será visible para personas de todo el planeta”: Baba Vanga.
La información se actualiza continuamente.
aDB


