En octubre de 2025, la figura del actor Alejandro Landero, quien brilló en la televisión mexicana durante los años ochenta, acaparó la atención de manera inesperada. Vecinos del intérprete, célebre por su papel como ‘galán de telenovelas’, compartieron en redes sociales la difícil situación de indigencia que atraviesa, haciendo un llamado a la solidaridad para brindarle apoyo en este complicado momento.
Moradores de la exclusiva colonia Condesa, en la Ciudad de México, se unieron para difundir la historia de Landero. Su objetivo no solo es ayudar al actor, sino también asegurar el bienestar de sus cuatro felinos y su fiel perra. Verónica Hernández, la vecina que visibilizó la crisis del actor, ha solicitado públicamente apoyo para que el artista pueda encontrar un refugio digno y cesar su actual pernocta en las inmediaciones de El Plaza Condesa.
El actor, recordado con cariño por su icónico papel en la telenovela Rosa Salvaje, reconoció estar sumido en “una situación complicada, un trance arduo”. No obstante, mantiene la esperanza de superar esta etapa con la generosa ayuda de la ciudadanía. En otro video que rápidamente se viralizó en internet, Landero expresó su profunda gratitud hacia quienes se han acercado a ofrecerle asistencia, mostrando además una notable serenidad ante los desafíos que la vida le presenta.
“Mi intención es dirigirme hacia Puerto Vallarta para promover un mensaje sobre la importancia de reconocer las capacidades, tanto físicas como no visibles, y fomentar la inclusión de personas con neurodivergencias, como es mi caso al ser autista y tener TDA”, declaró.
Conoce la Trayectoria de Alejandro Landero: El Galán de los 80
Alejandro Landero se consolidó como un destacado intérprete mexicano, dejando huella en producciones emblemáticas como Pasión y poder, Vivir un poco, Monte Calvario y, por supuesto, Rosa Salvaje. Sin embargo, los detalles más íntimos de su vida personal se mantuvieron bajo un velo de discreción hasta octubre de 2025, fecha en que su actual situación de vulnerabilidad salió a la luz pública.
A pesar de su reconocimiento en pantalla, la información sobre su vida personal, incluyendo su fecha y lugar de nacimiento, la identidad de sus familiares o posibles fuentes de ingresos adicionales, es escasa. Su época de mayor esplendor televisivo se ubica a finales de los años ochenta, con intervenciones memorables en:
- Rosa Salvaje (1987)
- Pasión y poder (1988)
- Un rostro en mi pasado (1989)
- Monte Calvario (1986)
- Blanca Vidal (1982)
Durante estas exitosas producciones, Landero tuvo el privilegio de compartir escenario con luminarias de la industria televisiva mexicana, como Verónica Castro, Laura Zapata, Guillermo Capetillo y Felicia Mercado, entre otras grandes figuras.
La carrera de Alejandro Landero también trascendió las fronteras de la televisión. En la década de los noventa, participó en la producción internacional Barbarian Queen II: The Empress Strikes Back y en la serie Entre la vida y la muerte. Lamentablemente, no existen registros públicos de proyectos posteriores a 1990 que documenten su actividad en el mundo del entretenimiento.
La Lucha Actual de Alejandro Landero: Inclusión y Nuevos Horizontes
Fue en 2025 cuando la comunidad se enteró de la difícil realidad que enfrentaba el actor, residiendo en las cercanías de El Plaza Condesa, específicamente en las calles Mazatlán, Juan de la Barrera y Agustín Melgar. Esta información fue dada a conocer por Verónica Hernández, la vecina que, conmovida, compartió su situación en redes sociales.
Un emotivo video capturó a Landero, cuya edad no ha sido especificada, sentado en un banco público. Lo acompañaban su querida perrita y cuatro jaulas de transporte que protegían a sus gatitos, demostrando su inquebrantable amor por sus mascotas en medio de la adversidad.
En sus propias palabras, Alejandro Landero manifestó su firme deseo de emprender un viaje desde la bulliciosa Ciudad de México hasta Puerto Vallarta. Su propósito es liderar una campaña de concienciación centrada en las diversas discapacidades, tanto físicas como invisibles, y abogar por la creación de entornos más inclusivos para todos.
“Mi deseo es convencer a los hoteleros de Puerto Vallarta de obtener una certificación internacional para que sus establecimientos no solo sean sostenibles, sino que también estén equipados para recibir al turismo inclusivo, que tanto necesita de lugares adecuados a dónde ir”, explicó Landero, subrayando la falta de conocimiento general sobre cómo interactuar adecuadamente con personas que, como él, viven con autismo y TDAH.
OdL
aDB
