Descubre cómo breves periodos de movimiento constante son esenciales para tu bienestar general. La Agencia Nacional de Seguridad Alimentaria, Medioambiental y Laboral de Francia (ANSES) ha actualizado sus recomendaciones para combatir el impacto negativo del estilo de vida sedentario.
Las nuevas directrices de la ANSES sugieren que interrumpir los periodos prolongados de inactividad con desplazamientos de tres a cinco minutos cada media hora puede ser un cambio clave. Esta práctica ayuda a mitigar los riesgos metabólicos, optimizar los niveles de azúcar en sangre y mejorar la respuesta a la insulina. Irène Margaritis, vicepresidenta de sanidad alimentaria, animal y vegetal de la ANSES, explicó a la AFP: “Una caminata de 5 minutos cada 30 minutos, a un ritmo ligero o moderado, mejora significativamente indicadores metabólicos como la glucemia y los niveles de insulina”.
Es importante destacar que no basta con simplemente levantarse o estirarse. La agencia recalca la necesidad de una actividad física real. Una pausa para romper con el sedentarismo debe implicar moverse activamente durante 3 a 5 minutos para estimular el sistema motor. “No es suficiente dar una vuelta por el espacio de trabajo para volver a sentarse; la pausa debe extenderse y activar de manera efectiva nuestras capacidades motoras”, enfatizó Margaritis.
Beneficios del Movimiento para Niños y Adolescentes
Las recomendaciones de la ANSES también abordan la importancia crucial de la actividad física en la infancia y adolescencia. Para los más jóvenes, se sugiere incorporar actividad de mayor intensidad durante tres minutos cada treinta minutos, lo que podría ser aún más beneficioso. “Los niños tienen una necesidad intrínseca de movimiento, y su nivel de actividad espontánea durante el día supera con creces el que desarrollan en el entorno escolar”, señaló la funcionaria.
El objetivo principal de estas directrices es reducir los periodos extensos de inactividad, independientemente de si se deben al uso de pantallas, al trabajo o al estudio. El informe de la ANSES alerta que permanecer sentado o acostado durante lapsos prolongados mientras se está despierto aumenta el riesgo de desarrollar graves afecciones, como diabetes tipo 2, obesidad, enfermedades cardiovasculares y determinados tipos de cáncer.
Este no es el primer aviso de la entidad francesa sobre los peligros de la inmovilidad. Ya en 2016, Salud Pública France recomendaba “dedicar tiempo a caminar un poco cada dos horas”. Durante el confinamiento de 2020, la ANSES aconsejó pausas activas cada 30 minutos. Ahora, estas recomendaciones se refuerzan con datos más contundentes y un objetivo claro: erradicar la cultura de la inmovilidad.
Es fundamental recordar que estas breves pausas activas no reemplazan la necesidad de un programa de ejercicio regular. La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que los adultos deben realizar al menos 150 minutos semanales de actividad física de intensidad moderada, como caminar o pedalear, o 75 minutos de ejercicio vigoroso, o una combinación de ambas, adaptándose a las necesidades y preferencias individuales.
OdL
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