Stephen Hawking advirtió sobre un peligro inminente, según revela 3I/Atlas.

El **cometa interestelar 3I/Atlas** ha completado recientemente su **perihelio**, el punto de máxima aproximación al Sol. Este intrigante cuerpo celeste ha capturado la atención de la comunidad científica y el público durante semanas, anticipando su acercamiento a nuestro planeta. Se espera que la trayectoria del 3I/Atlas lo lleve a una distancia de aproximadamente **1.8 unidades astronómicas** (más de **2,692 millones de kilómetros**) antes de finalizar el año 2025.

El tránsito de este cometa por nuestro sistema solar ha desatado un fascinante debate. Las posibilidades van desde la recolección de **muestras de su estela** por parte de agencias espaciales como la NASA, hasta las audaces especulaciones de expertos en astrofísica que barajan la hipótesis de que podría tratarse de un **objeto artificial** surcando el espacio a velocidades extraordinarias.

Avi Loeb, reconocido astrofísico de Harvard y una figura prominente en el estudio de objetos interestelares, ha propuesto en un estudio reciente una teoría que conecta el 3I/Atlas con el concepto del **Bosque Oscuro**. Esta idea, popularizada por el autor de ciencia ficción **Cixin Liu**, sugiere que el vasto universo podría estar poblado por **civilizaciones tecnológicamente avanzadas**, las cuales operan con un alto grado de discreción para evitar ser detectadas por otras **civilizaciones potencialmente hostiles** o “posibles amenazadores”.

El Cometa 3I/Atlas: ¿Reflejo de las Advertencias de Stephen Hawking?

Una de las bases del razonamiento de Loeb para su hipótesis radica en la notable ausencia de una **firma espectral de gas cometario** en las observaciones realizadas hasta la fecha. Adicionalmente, destaca el hecho de que el 3I/Atlas alcanzara su perihelio en una posición solar opuesta a la **Tierra**. Según su análisis, esta particular configuración orbital “podría ser una estrategia deliberada para dificultar **observaciones detalladas** con **telescopios terrestres** justo en el momento en que el objeto exhibe su **mayor luminosidad**“.

Estas especulaciones sobre el origen y la naturaleza del 3I/Atlas inevitablemente traen a la memoria una **profética advertencia** formulada por el icónico físico teórico británico, **Stephen Hawking**. En una memorable entrevista televisiva en 2010, Hawking expresó su cautela respecto a los potenciales encuentros con civilizaciones extraterrestres, sugiriendo que el resultado podría distar mucho de la utopía idealizada.

Hawking comparó la posible llegada de extraterrestres con la historia de la colonización europea: “Si los extraterrestres nos visitaran, el desenlace se parecería mucho a la llegada de Cristóbal Colón a América, un evento que, históricamente, no fue beneficioso para los pueblos originarios. Nuestra propia historia, plagada de ejemplos, nos enseña cómo la evolución de la inteligencia puede dar lugar a entidades que preferiríamos no encontrar”, advirtió el científico durante el programa “Into the Universe with Stephen Hawking”.

Cometa 3I/Atlas: Un Objeto Interestelar Clave para la Ciencia

Avi Loeb incluso expandió su teoría sugiriendo que estas hipotéticas entidades extraterrestres podrían ser exploradores o viajeros espaciales en constante búsqueda de “oportunidades para expandirse y colonizar cualquier mundo al que logren acceder”.

Más allá de las teorías más especulativas, el tránsito del **cometa interestelar 3I/Atlas** por nuestro sistema solar representa un acontecimiento de **considerable importancia científica**. Este descubrimiento lo consagra como el tercer objeto de origen intrínsecamente interestelar jamás detectado, siguiendo los pasos de sus predecesores: el enigmático **1I/’Oumuamua** y el cometa **2I/Borisov**, identificados respectivamente en los años **2017** y **2019**.

Aunque la ciencia aún trabaja para determinar las dimensiones exactas del 3I/Atlas, datos preliminares recopilados el **20 de agosto** por el potente **Telescopio Espacial Hubble** sugieren que el diámetro de su núcleo supera los 5,6 kilómetros. Es importante recalcar que el cometa **no representará una amenaza ni se aproximará peligrosamente a la Tierra**; su punto de máximo acercamiento a nuestro planeta se estima que no será inferior a 270 millones de kilómetros.