Marko Cortés Mendoza, líder nacional del Partido Acción Nacional (PAN), ha expresado profunda consternación ante el trágico homicidio de Carlos Alberto Manzo Rodríguez, presidente municipal de Uruapan, Michoacán. En un mensaje de solidaridad, Cortés Mendoza envió sus más sinceros pésames a la familia del edil y a todos los habitantes de Uruapan. Subrayó que estos actos de violencia sacuden a toda la nación, pues la pérdida de un alcalde no solo evidencia la grave problemática de inseguridad en México, sino también un gobierno rebasado por el poder del crimen organizado.
“No podemos permitir que la inestabilidad de nuestras instituciones, tanto a nivel nacional como estatal, se normalice ante la población, ni que los ciudadanos vivan con un miedo constante”, declaró Marko Cortés durante una entrevista en el programa “Noticias de la Mañana” de El Heraldo Televisión, parte de El Heraldo Media Group. Sus palabras resuenan con la preocupación generalizada sobre el estado de la seguridad en el país.
El dirigente del PAN insistió en la urgencia de que el gobierno federal vaya más allá de las condenas y las promesas de investigación. Es fundamental, dijo, que las autoridades implementen acciones contundentes y efectivas para prevenir futuros homicidios y restaurar la paz y la autoridad en las regiones afectadas.
Marko Cortés: El Crimen Organizado Extorsiona a Todos los Sectores, Incluyendo Alcaldes
“Observamos con gran preocupación cómo en diversas zonas del país, y de manera crítica en Michoacán, la autoridad municipal y estatal ha cedido el control a los grupos delictivos del crimen organizado. Esta es una señal inequívoca de la necesidad apremiante de reformular la política nacional de seguridad, pues la extorsión se ha convertido en una práctica generalizada”, señaló el legislador.
Marko Cortés detalló que la extorsión ya no se limita a comerciantes, transportistas o productores agrícolas. Ahora, incluso los alcaldes se ven en la disyuntiva de realizar pagos mensuales a grupos criminales para poder gestionar sus administraciones municipales, lo que representa un grave atentado contra la soberanía y la gobernabilidad local.
El senador panista recordó los alarmantes casos en Michoacán, donde se han registrado siete asesinatos de alcaldes y uno más de un edil electo. Esta situación, afirmó, demuestra que los grupos criminales están dictando quién puede gobernar y quién no, dejando a la población a merced de su poder. Añadió que esto contrasta fuertemente con los discursos oficiales que insisten en una supuesta mejora de la seguridad en México.
Marko Cortés enfatizó que la extorsión se ha convertido en el gravamen más devastador para los mexicanos, una carga silenciosa y mortal. Denunciar estas acciones ante las autoridades, en muchos casos, equivale a firmar una sentencia de muerte, dada la aparente incapacidad de protección.
Aunque desconoce el número exacto de elementos de seguridad asignados al extinto alcalde de Uruapan, Cortés Mendoza describió a Carlos Manzo como un hombre íntegro y valiente que no temió exponer la cruda realidad de su municipio y enfrentar al crimen organizado. Su caso, lamentó, es un reflejo de las innumerables personas que han sufrido y denunciado la extorsión a lo largo del tiempo.
Finalmente, el líder del PAN planteó una reflexión crucial: ante la ausencia de una autoridad capaz de defender y proteger a la ciudadanía frente a la barbarie del crimen organizado, ¿quién se atreverá a alzar la voz y denunciar los abusos?
aDB
