La temporada de festividades de fin de año es sinónimo de alegría y reuniones, pero también puede ser un desafío para mantener tus hábitos saludables. Es común caer en la tentación de los platillos típicos y descuidar la nutrición balanceada y la actividad física, lo que podría afectar tu bienestar al comenzar el nuevo año.
Expertos como Gabriela Borrayo Sánchez, catedrática y secretaria general de la Facultad de Medicina de la UNAM, advierten que las primeras semanas de enero experimentan un aumento significativo de consultas médicas, especialmente por problemas cardiovasculares. Esta tendencia se relaciona directamente con el consumo elevado de alimentos y bebidas calóricas, sumado a una menor práctica de ejercicio regular.
Mantén una Dieta Equilibrada en Festividades: Consejos Clave
Durante las celebraciones de diciembre, el aumento de peso es una preocupación frecuente debido a las reuniones sociales y la abundancia de comida. Las bajas temperaturas pueden incrementar el apetito y disminuir la motivación para hacer ejercicio. En este periodo, es vital no descuidar tus rutinas de alimentación saludable ni el seguimiento de tratamientos médicos, especialmente si padeces condiciones como hipertensión, colesterol alto o diabetes.
Para disfrutar de las delicias festivas sin comprometer tu salud cardíaca ni tus hábitos alimenticios, la Dra. Borrayo Sánchez, en declaraciones a la UNAM, subraya la importancia del descanso. Asegurar un sueño reparador, entre seis y ocho horas diarias para hombres y seis para mujeres, es fundamental, ya que la falta de sueño impacta negativamente en diversos aspectos de tu salud.
Pautas Esenciales para Preservar tu Salud Durante las Festividades
- Planifica tus comidas: Establece horarios regulares para tus ingestas, asegurando que tu dieta sea equilibrada, rica en proteínas, cereales integrales, frutas y verduras en las porciones adecuadas.
- Snacks saludables: Incluye opciones ligeras y nutritivas entre tus comidas principales, como manzanas, jícamas o pepinos, para mantener la saciedad y evitar excesos.
- Modera condimentos: Evita añadir sal o azúcar adicional a tus alimentos para controlar la ingesta de sodio y azúcares.
- Reduce el consumo de procesados: Disminuye la ingesta de bebidas azucaradas, alimentos fritos, embutidos en exceso y modera el consumo de alcohol y tabaco.
- Actividad física regular: Mantén una rutina de ejercicio de al menos 30 minutos diarios, cinco veces por semana, para mantenerte activo y quemar calorías.
- Objetivos de pérdida de peso: Si tu meta es perder peso, se recomienda extender la duración del ejercicio a 60 minutos, cinco días a la semana.
- Manejo del estrés: Incorpora actividades que te ayuden a gestionar el estrés, como el yoga, la natación, el baile o cualquier otra disciplina que disfrutes.
aDB
