El 5 de noviembre, se dictó sentencia contra una mujer responsable del asesinato de su cónyuge, utilizando un arma blanca de origen oriental. Este impactante suceso, que conmocionó a la opinión pública, se difundió rápidamente en redes sociales debido a la brutalidad con la que la agresora atacó a su pareja.
Wiechen Huang, la perpetradora, ha sido condenada a una pena que abarca entre 37 años y cadena perpetua. Fue declarada culpable del homicidio de Chen Chen Fei, de 47 años, y del intento de asesinar a Hsi Wei Huang, en un violento incidente ocurrido el pasado 18 de julio de 2024.
Los reportes de la prensa local indican que la madre de la víctima escuchó los gritos de su hija y, al entrar en el dormitorio, presenció el ataque. Huang intentó agredir a Hsi, quien se defendió desesperadamente mientras era atacada con el arma. Este terrible evento causó una profunda conmoción en la comunidad.
Condena de 37 Años a Mujer por Homicidio con Arma Blanca
El 3 de noviembre, Hsi, testigo clave desde Taiwán, declaró ante el tribunal número 3 de Pomona a través de videoconferencia. Detalló con estremecedores relatos cómo fue atacada en su propio hogar, mientras dormía, por su agresora, quien empleó un arma de origen japonés. La víctima describió el horror vivido:
“No logro comprender la magnitud del odio que la llevó a cometer este acto. Empuñaba el arma como si intentara absorber la mayor cantidad de sangre posible, semejante a una criatura sedienta. Parecía disfrutar del espectáculo sangriento, sin mostrar el menor atisbo de arrepentimiento”, relató Hsi, describiendo la brutalidad del ataque con arma blanca.
Los oficiales llegaron al lugar de los hechos alrededor de las 15:30 horas. Encontraron a la madre de Fei en medio de la calle, pidiendo auxilio y visiblemente afectada por una hemorragia. Tras indicarle que soltara el arma que portaba, ella los condujo hasta la residencia.
Al ingresar, las autoridades descubrieron a Chen Chen Fei sin vida en la habitación donde se había desarrollado el brutal ataque. En el momento del descubrimiento, Wiechen Huang yacía recostada en una cama, rodeada de pastillas. Fuentes policiales sugirieron que la agresora se encontraba bajo la influencia de sustancias, lo que podría haber sido un factor desencadenante del acto.
aDB
