Mundial FIFA 2026: ¿El Evento Deportivo Más Contaminante de la Historia?
La Copa Mundial de la FIFA 2026 se perfila como un evento deportivo de alcance global sin precedentes, reuniendo a tres países anfitriones, 16 ciudades sede y a millones de aficionados de todo el mundo. Sin embargo, esta celebración deportiva masiva trae consigo una seria preocupación: su potencial impacto ambiental. Las proyecciones sugieren que podría convertirse en el torneo de fútbol más contaminante jamás organizado, debido a la intensificación de los vuelos y la complejidad logística inherente a un evento de esta magnitud en Norteamérica.
El Impacto Ambiental del Mundial 2026: Un Análisis Profundo
Un riguroso informe, denominado “FIFA’s Climate Blind Spot”, elaborado por un colectivo de científicos y organizaciones ambientales, advierte que el Mundial 2026 podría generar aproximadamente nueve millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2). Esta alarmante cifra supera con creces las emisiones de cualquier evento deportivo previo, subrayando la urgente necesidad de priorizar la sostenibilidad en el deporte de alto impacto.
Factores Clave que Contribuyen a la Huella Climática:
- Transporte Aéreo Intensivo: La falta de una red ferroviaria interconectada y eficiente entre las sedes, sumada a la masiva movilidad de aficionados y personal, provocará un uso desmedido de vuelos. Los viajes aéreos se consolidan como el principal contribuyente a la huella de carbono del torneo.
- Expansión del Formato del Torneo: La ampliación a 48 selecciones y la programación de 104 partidos incrementan exponencialmente los desplazamientos, el consumo energético y la presión sobre los ecosistemas locales.
- Consumo Energético y Generación de Residuos: La infraestructura necesaria para albergar a millones de personas, incluyendo estadios, hoteles y eventos paralelos, demandará un alto consumo de energía y resultará en una producción masiva de residuos.
El Desafío Climático en las Sedes del Mundial
Además de las emisiones directas, varias ciudades sede del Mundial 2026 enfrentan desafíos climáticos significativos. Se estima que al menos ocho ciudades sede experimentarán condiciones climáticas extremas, incluyendo calor abrasador o episodios de inundaciones. Esta realidad resalta la interconexión entre megaeventos y la crisis climática global, haciendo indispensable la integración de la resiliencia ambiental en la planificación.
Ciudades bajo Presión Climática:
- Monterrey y Houston: Se anticipa que estas ciudades experimentarán temperaturas superiores a los 30.0°C, lo que exige soluciones de enfriamiento avanzadas y estrategias de gestión del calor.
- Miami y el Hard Rock Stadium: Esta sede presenta un alto riesgo de inundaciones debido a la temporada de huracanes en verano, lo que requiere infraestructuras adaptadas y planes de contingencia robustos.
La inversión estimada para mitigar emergencias relacionadas con el calor en tan solo seis estadios asciende a 171 millones de dólares, una cifra que ilustra la magnitud de los retos climáticos a los que se enfrentará el torneo.
¿Neutralidad de Carbono o “Greenwashing”? El Compromiso de la FIFA
La FIFA ha declarado su meta de alcanzar la neutralidad de carbono para el año 2040. Sin embargo, el informe “FIFA’s Climate Blind Spot” señala una carencia notable: la ausencia de un plan de acción verificable que sustente esta ambición. Las declaraciones de intenciones, sin mecanismos concretos de implementación y seguimiento, corren el riesgo de ser interpretadas como “greenwashing”, es decir, estrategias de marketing que simulan un compromiso ecológico sin una base sólida.
La Importancia de la Acción Verificable:
Álvaro Zavala, especialista en sostenibilidad y director de México por el Clima, subraya la necesidad imperante de pasar de la mera conversación a la acción concreta. “El desafío fundamental es transitar de la discusión a la implementación”, afirma Zavala. “Muchas corporaciones anuncian compromisos climáticos sin presentar resultados tangibles. Si bien no puedo afirmar que la FIFA esté incurriendo en esto, la ausencia de un plan detallado debilita la credibilidad del mensaje.”
La adopción de sistemas de medición rigurosos, similares a los desarrollados por México por el Clima, permite cuantificar con precisión cada emisión y diseñar estrategias de compensación efectivas, ya sea mediante bonos de carbono o el apoyo directo a proyectos de restauración ecológica locales.
El Vínculo entre la FIFA y la Industria de los Combustibles Fósiles
Un aspecto crucial analizado en el informe es la relación de la FIFA con empresas del sector de los combustibles fósiles. La designación de Aramco, la petrolera estatal saudí, como principal patrocinador del Mundial 2026 genera una preocupación adicional. Se estima que esta alianza podría resultar en la adición de decenas de millones de toneladas de carbono, derivadas del incremento en actividades de publicidad y operaciones asociadas.
Una Oportunidad de Transformación:
A pesar de las críticas, Zavala percibe una oportunidad valiosa en esta vinculación. “No encuentro un error inherente en asociarse con países como Arabia Saudita, sino más bien una oportunidad”, comenta. “Si la FIFA implementa estándares de sostenibilidad más rigurosos, puede ejercer influencia sobre sus socios y acelerar la transición energética. Todos provenimos de una industria ligada al petróleo; lo verdaderamente importante es nuestra capacidad de evolución.”
La integración de criterios ecológicos en la organización de eventos masivos puede incrementar los costos hasta en un 35%. No obstante, existen modelos exitosos que demuestran la viabilidad de adoptar prácticas sostenibles. La Fórmula 1, por ejemplo, ha implementado iniciativas como la entrega de mariposas con papel semilla a los asistentes del Gran Premio de México, promoviendo la reforestación y la participación ciudadana. Este tipo de acciones son las que se requieren como lineamientos para todos los eventos de gran escala.

El Mundial FIFA 2026 se erige como un espejo de la situación actual de nuestro planeta: un espectáculo deportivo de proporciones épicas que, al mismo tiempo, nos confronta con la urgencia de actuar ante la crisis climática. La meta es clara: asegurar que la huella que dejemos sea, en la medida de lo posible, positiva.
Datos Clave sobre el Impacto Climático y Logístico:
- Vuelos Masivos: Se proyecta un número sin precedentes de vuelos conectando las 16 ciudades sede del torneo.
- Nueve Millones de Toneladas de CO2: Esta es la cifra estimada de emisiones de gases de efecto invernadero para el Mundial 2026.
- Ocho Sedes Bajo Riesgo Climático: Varias ciudades sede enfrentan la posibilidad de experimentar calor extremo o inundaciones.
- Inversión para Mitigación Térmica: Se estima una inversión de 171 millones de dólares para garantizar la seguridad de los estadios ante las altas temperaturas.
- Compromiso FIFA: La organización aspira a la neutralidad de carbono para 2040, aunque aún falta un plan de acción detallado y verificable.
- Patrocinio Significativo: La alianza con Aramco plantea interrogantes sobre el nivel de compromiso real con la sostenibilidad.
aDB


