Descubre las graves deficiencias encontradas en la Plataforma Nacional de Transparencia, anteriormente gestionada por el extinto INAI. Tras la controversia por la asunción de control por parte del Gobierno de México, la Secretaría de Buen Gobierno y Anticorrupción, liderada por Raquel Buenrostro, ha revelado las alarmantes inconsistencias detectadas en el sistema.
La plataforma exhibía serios problemas de seguridad, incluyendo la presencia de contenido no relacionado como comercio electrónico, sitios de apuestas y juegos, además de estar plagada de programas maliciosos. Se identificaron secciones con dominios .org que sugerían una gestión externa no autorizada. Un exhaustivo proceso de limpieza y depuración ha sido implementado para remediar estas vulnerabilidades.
Las auditorías revelaron un preocupante estado de los sistemas. Se confirmó la ausencia de mantenimiento y protocolos de seguridad adecuados. La arquitectura tecnológica no se alineaba con los estándares constitucionales, y se detectó el uso de software obsoleto con una antigüedad de 2003. Previo a la transferencia de la plataforma al INAI, las fallas eran recurrentes debido a la negligencia en su cuidado y actualización.
Durante el proceso de entrega-recepción formal por parte del INAI, se constató la alarmante falta de documentación crucial para la operación y administración de la plataforma.
La secretaria Buenrostro lamentó la ausencia de los documentos originales y la naturaleza incompleta de la mayoría de los expedientes, declarando que la complejidad de la situación ha ocasionado daños que, en muchos casos, son irreparables.
Como resultado de las mejoras implementadas, se ha logrado una optimización significativa en la localización de solicitudes. Asimismo, se ha integrado de manera completa el proceso de resolución, garantizando un flujo de trabajo más eficiente y transparente.
aDB
