- El duelo por Lola sumió al padre en el alcohol
- Las cámaras de seguridad captaron el momento en que Lola, al regresar de la escuela, fue abordada por la mujer, originaria de Argelia, quien la llevó a su residencia para someterla a tortura y finalmente acabar con su vida utilizando un par de tijeras.
- Hallan vestigios de posible ritual en el cuerpo de Lola
El profundo dolor por la pérdida de su hija de 12 años, Lola, quien fue víctima de abuso sexual y brutalmente asesinada, llevó a su padre a sucumbir ante la tristeza y fallecer. La responsable de este atroz crimen en París, Francia, es Dahbia Benkird, de 27 años.
Johan Daviet, el padre de la menor, recayó en el alcoholismo tras el hallazgo del cuerpo de su hija. La madre, Delphine Daviet, relató ante el tribunal que su pareja no pudo sobrellevar el descubrimiento de la niña dentro de una maleta en el maletero de un coche, atada y envuelta en cinta adhesiva, el 11 de octubre de 2022.
El duelo por Lola sumió al padre en el alcohol
En el transcurso del juicio, que ha captado la atención internacional, se han revelado detalles escalofriantes. La madre testificó que su esposo, Johan, quien había logrado dejar atrás el alcoholismo, volvió a beber incesantemente ante la incapacidad de lidiar con la devastación de la pérdida familiar. Thibault Daviet, hermano de la víctima, añadió que su padre dejó una carta a su hija en el domicilio de la agresora, expresando su anhelo por reunirse con ella.
Las cámaras de seguridad captaron el momento en que Lola, al regresar de la escuela, fue abordada por la mujer, originaria de Argelia, quien la llevó a su residencia para someterla a tortura y finalmente acabar con su vida utilizando un par de tijeras.
Hallan vestigios de posible ritual en el cuerpo de Lola
La investigación ha arrojado que Benkird mostraba interés por prácticas de brujería y había investigado sobre el tema previo al espantoso suceso. Al examinar el cuerpo de la menor, se encontraron los números “1” y “0” pintados con esmalte en ambos pies, además de 38 heridas en la espalda y cuello, y la asfixia como causa de muerte, según los informes forenses.
Benkird confesó haber obligado a la niña a participar en actos de naturaleza sexual, argumentando que se trataba de una represalia por no haberle proporcionado la llave de un apartamento, según las pesquisas de las autoridades francesas.
La justicia francesa sentenció a Dahbia Benkired a un mínimo de 30 años de reclusión, una de las condenas más severas registradas en la historia del país. Este fallo se une a las escasas sentencias de cadena perpetua dictadas en Francia, como las de los criminales Michel Fournirer y Salah Abdeslam, involucrados en los atentados de París en 2015 que costaron la vida a 130 personas.
