En su más reciente obra cinematográfica, titulada “Las Locuras”, el director colombiano Rodrigo García indaga en las profundidades del comportamiento humano. Esta producción surge de su interés por retratar individuos excepcionales que, en determinados momentos, pierden el control de sus vidas.
“Siempre me ha interesado la gente muy capaz, muy inteligente, muy profesional, que en ciertas situaciones puede perder el sentido y descarrilarse”, afirmó el director.
La película narra las historias de seis mujeres inmersas en procesos de autoexploración, influenciadas por el aislamiento, la autocensura y las presiones sociales y familiares. Sus trayectorias convergen de manera inesperada un día de lluvia en la Ciudad de México, todas conectadas a través del personaje de ‘Renata’, interpretado por Cassandra Ciangherotti.
García reconoce que, al abordar la narrativa desde una perspectiva masculina, es susceptible de ser criticado por opinar sobre las mujeres. Con un toque de humor, recordó una reseña negativa que recibió tras la exhibición de la película en el Festival Internacional de Cine de Morelia:
“Vi uno de una chava que decía: otra película de un cab$%& explicando a las mujeres; bueno, ni hablar”.
No obstante, el director subraya que abordar temas ajenos a la propia experiencia personal implica asumir riesgos, y él se siente cómodo escribiendo relatos protagonizados por mujeres. Incluso, ha experimentado situaciones en las que sus guiones femeninos no llegan a buen puerto porque las actrices a las que se les presentan no se identifican con ellos.
“Si estás trabajando fuera de tu identidad, los blancos sobre los negros, los jóvenes sobre los viejos, los hombres sobre las mujeres, vas a ser medido; eso tienes que esperarlo”, agregó.
Por ello, considera que la retroalimentación más valiosa proviene del contacto directo con las actrices:
“Ya para cuando estoy filmando la película no tengo tanto miedo de estar muy equivocado con mi punto de vista patriarcal, porque ya tantas actrices de diferentes edades y con mucha experiencia le han dado el visto bueno a los personajes”.
Cassandra Ciangherotti expresó su convicción sobre la importancia de que hombres y mujeres dialoguen entre sí, ya que de lo contrario, se correría el riesgo de caer en una complacencia mutua sin posibilidad de crecimiento. Por ello, ve el intercambio de miradas como una fuente de enriquecimiento, incluso cuando surge de una confrontación:
“El hombre diciéndole a la mujer ‘estás loca’ ayuda a que la mujer sintetice, se acote, se arraigue”.
La película cuenta con un elenco destacado de actrices mexicanas. Además de Ciangherotti, participan Ángeles Cruz, Natalia Solián, Naian González Norvind, Ilse Salas, Fernanda Castillo, Mercedes Hernández, Mónica del Carmen, Vicky Araico, Luisa Huertas y Adriana Barraza. También intervienen Raúl Briones y Daniel Tovar.
García explicó que el elenco fue seleccionado cuidadosamente, basándose en su confianza en la dinámica de trabajo, lo que le permitió crear varios personajes pensando en actrices específicas.
“Sabía que si tienes un grupo de gente muy sobresaliente, atrae a otra gente también; eso me ha pasado mucho”, explicó el cineasta.
Cassandra relató cómo su personaje fue tomando forma en interacción con los demás, lo que le brindó la oportunidad de vivir momentos de total desbordamiento.
“No fue una creación libre, y eso es lo lindo: en esa cosa delimitada es donde aparece la creatividad. Hay cosas gestuales, físicas, que tiene el personaje y que yo no planeé; de repente están ahí, como algo físico que viene de una cosa interior que se está moviendo y se expresa físicamente”
MAAZ
