Noviembre de 2025 marca un período de gran interés astronómico, ofreciendo una serie de fenómenos celestes que deleitarán tanto a aficionados como al público en general. Los cielos de este mes estarán protagonizados por el avistamiento de la luna llena más grande del año, así como por la ocurrencia de diversas lluvias de meteoros y un momento óptimo para la observación de Urano y otros cuerpos celestes.
Para poder disfrutar plenamente de estos espectáculos, es aconsejable tomar ciertas precauciones. Se recomienda buscar ubicaciones alejadas de fuentes de luz artificial, especialmente evitando las grandes urbes. Las noches despejadas del otoño son ideales. Asimismo, contar con prismáticos o telescopios, además de cámaras, facilitará la apreciación y el registro de estos eventos.
La Luna del Castor
El acontecimiento astronómico más destacado será la Superluna Llena prevista para el 5 de noviembre. Conocida tradicionalmente como la Luna del Castor, nuestro satélite natural alcanzará su perigeo, el punto más cercano a la Tierra en su órbita, coincidiendo con su fase de plenitud. Este fenómeno propiciará que la Luna se vea ligeramente mayor y considerablemente más luminosa que en sus ciclos lunares habituales, posicionándose como la Superluna más prominente de 2025. Su observación será posible durante las noches del 4, 5 y 6 de noviembre.
Meteoros en noviembre
El undécimo mes del año se caracteriza por ser especialmente prolífico para los aficionados a los meteoros, albergando el clímax de actividad de tres importantes lluvias de estrellas, todas ellas originadas por los restos del cometa Encke:
- Táuridas del Sur, el 4 y 5 de noviembre: Aunque su actividad es moderada, con una tasa de aproximadamente 5 meteoros por hora, esta lluvia es conocida por la frecuente aparición de bólidos o bolas de fuego, meteoros de intensa luminosidad que eclipsan el brillo de Venus.
- Táuridas del Norte, el 11 y 12 de noviembre: Como complemento a su homónima del sur, también se anticipa la presencia de meteoros de gran brillo.
- Leónidas, el 17 y 18 de noviembre: Derivada del cometa Tempel-Tuttle, la lluvia de las Leónidas es célebre por haber generado impresionantes tormentas de meteoros en el pasado.
Adicionalmente, el 8 de noviembre, tendremos la oportunidad de observar el cometa C/2025 A6, popularmente conocido como Lemmon. Este cometa alcanzará su perihelio, el punto de máxima aproximación al Sol, lo que podría permitir su visualización a simple vista en cielos oscuros. Según la UNAM, desde territorio mexicano, será visible hacia el oeste entre las 18:30 y las 19:30 horas.

Planetas visibles
No se pierda la oposición de Urano el 21 de noviembre. Este gigante helado se encontrará en una posición diametralmente opuesta al Sol, visto desde la Tierra, alcanzando su máximo brillo y permaneciendo visible durante toda la noche. Se recomienda el uso de binoculares o telescopios para una observación detallada.
Asimismo, en las madrugadas del 24 y 25 de noviembre, los planetas Venus y Mercurio ofrecerán un espectáculo al aparecer inusualmente cercanos en el cielo durante las primeras horas del día, justo antes del amanecer, aproximadamente media hora antes de la salida del Sol.
Conjunción Lunar
A lo largo de este mes, la Luna protagonizará acercamientos notables con diversos planetas y agrupaciones estelares. Entre los eventos más destacados se encuentran la Luna en proximidad a Saturno los días 2 y 29 de noviembre, así como su cercanía a Júpiter y Pólux el 10 de noviembre, proporcionando hermosas vistas celestes fácilmente apreciables a simple vista.
Finalmente, el 20 de noviembre se producirá la Luna Nueva, también conocida como la noche más oscura del mes. Esta fase lunar ofrece las condiciones ideales de oscuridad para la observación de objetos de cielo profundo, como galaxias y nebulosas, al no verse interferida por la luz de la Luna.

