La Violencia Digital: Un Peligro Creciente para la Salud Mental de Niños y Adolescentes
La omnipresencia de la tecnología ha transformado las interacciones sociales, y lamentablemente, ha dado lugar a nuevas formas de acoso y violencia entre jóvenes. Un alarmante porcentaje de la violencia que afecta a menores en la Ciudad de México tiene sus raíces en el mundo digital, donde las redes sociales y la inteligencia artificial (IA) ejercen una influencia directa y a menudo perjudicial en su bienestar emocional y mental.
El Impacto de las Plataformas Digitales en la Agresión entre Pares
Los informes “Violencia entre Pares (2023)” y “Estrategias de Prevención y Atención del Suicidio en las Infancias (2024)” de la Comisión de Derechos Humanos de la CDMX (CDHCM) subrayan esta preocupante tendencia. Casos recientes, como la agresión sufrida por una estudiante en Tláhuac, ponen de manifiesto cómo la tecnología puede amplificar dinámicas de exclusión y hostigamiento.
Como señala María Elena Esparza, presidenta y fundadora de Ola Violeta A.C., “Los adolescentes se exponen a mensajes de odio, sexualización o relaciones distorsionadas con los afectos, sobre todo con el uso de asistentes virtuales o novios digitales”.
Estadísticas Reveladoras sobre la Violencia Digital
La encuesta “Violencia entre Pares (2023)”, que incluyó a más de mil 200 menores, reveló que uno de cada diez participantes había experimentado o estaba experimentando violencia o discriminación en línea. Los motivos más comunes incluyen el estatus socioeconómico y el racismo, pero también se suman otras formas de discriminación relacionadas con el color de piel, la apariencia física, la discapacidad, la orientación sexual, la identidad de género o la religión.
Los tipos de violencia reportados por la CDHCM son:
- Psicoemocional: 59.84%
- Física: 38.41%
- Sexual: 1.75%
La Cultura de la Viralización y la Inacción
Un aspecto particularmente preocupante es la tendencia a documentar en lugar de intervenir. En situaciones de agresión, muchos jóvenes prefieren grabar con sus teléfonos móviles antes que buscar ayuda o detener la situación. Esto refleja una cultura donde la búsqueda de “likes” y la viralización a menudo eclipsan la empatía y la responsabilidad social. El teléfono, como herramienta, puede ser utilizado tanto para el bien como para el mal, y es fundamental inculcar valores que guíen su uso.
La IA y la Migración de la Violencia a las Pantallas
La inteligencia artificial está facilitando que la violencia entre pares se traslade de los pasillos escolares a las plataformas digitales. Esto incrementa el riesgo de que los menores enfrenten problemas de salud mental, incluyendo pensamientos suicidas.
Facebook y WhatsApp se han convertido en escenarios frecuentes de acoso, exponiendo a los jóvenes a mensajes de odio que deterioran su bienestar emocional.
Incremento de Síntomas Depresivos y Pensamientos Suicidas
El estudio “Estrategias de Prevención y Atención del Suicidio en las Infancias” destaca que un porcentaje significativo de adolescentes entre 14 y 19 años ha considerado el suicidio. Además, ha aumentado el número de menores de 10 a 19 años con síntomas depresivos, siendo el insomnio y las alteraciones del sueño los más comunes, a menudo vinculados al uso excesivo de redes sociales y la IA.
Aquellos con mayor vulnerabilidad en salud mental, como quienes ya sufren ansiedad, depresión o exclusión, pueden buscar respuestas en la IA. Si bien puede ser un refugio, también se convierte en un espacio de riesgo al exponerlos a anuncios de “amigos virtuales” o “novios virtuales”, lo cual es especialmente peligroso para adolescentes en proceso de formación de su identidad afectiva y sexual.
Navegando el Mundo Digital de Forma Segura
El caso de Tláhuac es un reflejo de una generación que crece hiperconectada pero, a menudo, carente de acompañamiento emocional, orientación digital y límites claros. Es crucial educar a los niños y adolescentes sobre el uso responsable de la tecnología, estableciendo límites y fomentando un entorno donde la empatía prevalezca sobre la inmediatez y el anonimato.
Recomendaciones para la Protección Digital
Para salvaguardar a los menores en el uso de herramientas digitales e IA, la Policía Cibernética ha emitido diversas recomendaciones:
- Navegadores y Plataformas Seguras: Utilizar navegadores y aplicaciones diseñadas para niños, con filtros de contenido y restricciones de interacción.
- Hábitos Digitales Saludables: Fomentar rutinas de navegación seguras, establecer horarios limitados de uso y evitar sitios desconocidos.
- Comunicación y Confianza: Crear un espacio donde los menores se sientan cómodos para hablar de sus experiencias en línea sin temor a ser castigados.
- Privacidad y Desconocidos: Instruir a los menores para que nunca compartan información personal ni interactúen con desconocidos en línea, independientemente de su aparente edad.
- Actualizaciones Constantes: Mantener actualizados los dispositivos, sistemas operativos y aplicaciones para prevenir vulnerabilidades.
Estrategias Clave para Proteger a los Menores:
- Preferir navegadores y aplicaciones para menores con filtros y restricciones.
- Establecer rutinas digitales saludables y limitar el tiempo de uso.
- Educar sobre la importancia de no compartir información personal ni interactuar con desconocidos.
- Fomentar un ambiente de confianza para que compartan sus experiencias en línea.
Es fundamental una moderación activa y protocolos de intervención en el entorno digital para mitigar los riesgos asociados a la violencia y proteger la salud mental de las nuevas generaciones.
La violencia escolar se ha mudado a las pantallas. Padres y educadores deben estar alertas ante los riesgos que enfrentan los menores en el entorno digital. #SaludMental #ViolenciaDigital #Adolescentes #SeguridadEnInternet
— Excélsior (@Excelsior) enero 29, 2024
*(Nota: El enlace de YouTube es un placeholder. Debería ser reemplazado por el video real si está disponible.)*
