En el undécimo asalto de su defensa del título pluma de la Organización Mundial de Boxeo, el boxeador mexicano Rafael Espinoza forzó la retirada del contendiente ucraniano Arnold Khegai.
El Divino dominó a su oponente con una combinación de alcance, poder y un alto volumen de golpes. Las lesiones de Khegai, incluyendo sangrado nasal, un corte en el ojo izquierdo y la inflamación en su frente, llevaron a él y a su equipo a decidir no continuar la pelea.
Espinoza, quien mantiene su récord invicto, hizo su vigésima octava aparición profesional, habiendo ganado 24 de sus combates por nocaut.
A pesar de los esfuerzos de Khegai por cambiar el curso del combate con potentes derechas, la estrategia defensiva del campeón y sus golpes rectos mantuvieron al retador a raya.
El boxeador de Guadalajara expresó su ambición de unificar los títulos de su categoría tras esta victoria.
En otro combate de la noche, el invicto Lindolfo Delgado, exolímpico mexicano, mantuvo su racha sin derrotas en una reñida contienda.
Delgado, quien visitó la lona en el último round pero logró levantarse para completar la distancia, se enfrentó a Gabriel Gollaz Valenzuela. El resultado fue una ajustada victoria por decisión dividida, con dos jueces marcando 114-113 a favor de Delgado y el tercer juez votando 114-113 para Gollaz.
Con este resultado, el pugilista de Monterrey mejoró su récord a 24 victorias y 0 derrotas, con 16 nocauts, aunque el público respondió con abucheos.
Dentro de la misma cartelera, Emiliano Vargas, también invicto, obtuvo una victoria por decisión unánime contra Jonathan Montrel, asegurándose el cinturón latino welter de la Organización Mundial de Boxeo. Las tarjetas de los jueces fueron 110-89, 99-90 y 99-90.
El peso pesado Richard Torrez Jr. amplió su racha de victorias a 14-0, con 12 nocauts, al derrotar a Tomas Salek de República Checa en el primer asalto.
Un gancho al rostro de Salek causó la fractura de su nariz, impidiéndole continuar la pelea más allá de los dos minutos y cuarenta y cinco segundos.

