El 25 de octubre de 2023 fue un punto de inflexión para la industria turística en Acapulco. La llegada del huracán Otis causó una devastación considerable, tomando por sorpresa a numerosos visitantes que disfrutaban de sus vacaciones en el puerto y la bahía. Han transcurrido dos años desde aquella madrugada en la que un fenómeno meteorológico arrasó con uno de los destinos vacacionales más relevantes de México. Por ello, es pertinente evaluar los avances en la reactivación del turismo en la ciudad de Acapulco.
Tras un esfuerzo conjunto entre inversores y el Gobierno de Guerrero, Acapulco ha comenzado a recuperar su afluencia de turistas. Las cifras proporcionadas por la Subsecretaría de Turismo reflejan un retorno gradual de visitantes a uno de los puertos más icónicos de México. Ahora, se procede a un análisis comparativo del turismo previo y el que se registra a dos años de la embestida del huracán.
A pesar de las estadísticas oficiales, quienes dependen del sector turístico perciben que Acapulco aún no ha recuperado su esplendor anterior a la llegada del desastre natural a las costas guerrerenses. A principios de octubre, El Heraldo de México realizó un recorrido por la Costera Miguel Alemán para conversar con trabajadores de un hotel y recoger sus perspectivas, a menos de tres semanas de la conmemoración del segundo aniversario de Otis.
Los empleados expresaron su gratitud por el paulatino regreso de la actividad turística a la bahía y al puerto de Acapulco, aunque también manifestaron que la situación podría mejorar, sintiendo que al destino le falta la vitalidad de antaño. Tras dialogar con recepcionistas, camareros y botones, se constató un sentimiento unánime: agradecimiento a los visitantes, pero con la certeza de que Otis transformó el turismo en Acapulco de manera permanente.
“La llegada de Otis marcó un antes y un después en Acapulco”
La afirmación recurrente entre el personal hotelero fue que Otis dejó una huella imborrable en todo Acapulco. Los hoteles se encuentran ahora mejor equipados para afrontar emergencias y desastres naturales como el huracán de aquel ya lejano 2023. No obstante, son conscientes de que los turistas no visitan Acapulco con la misma frecuencia de antes.
Un claro indicio de la transformación permanente del turismo en el puerto de Acapulco se observó durante una visita a la bahía, donde se pronosticaron tormentas eléctricas diarias durante un fin de semana, lo que provocó numerosas cancelaciones de última hora. Los hoteles ahora ofrecen anulaciones sin costo hasta 24 horas antes, reconociendo que las condiciones climáticas pueden influir en la decisión de los viajeros de posponer su visita a una de las playas más codiciadas del país.
“Existe un antes y un después de Otis en Acapulco”, declaró un botones de un hotel en la Costera. El empleado afirmó que desde el 2023 se han implementado más protocolos, hay un mayor número de cancelaciones y algunos hoteles han incorporado generadores y otras medidas de seguridad para proteger a sus huéspedes.
Más allá de las percepciones del personal hotelero, se constató que las grandes cadenas hoteleras operaban con una buena ocupación, aunque esta situación no se replicaba en todos los establecimientos. Al recorrer la playa, se observaban edificios que aún presentaban cicatrices de Otis y numerosos hoteles con baja afluencia. Los establecimientos de menor tamaño y algunos conjuntos residenciales aún mostraban las secuelas del huracán del 25 de octubre de 2025.
Cifras de Acapulco: Antes y Después de Otis
Según datos de la Secretaría de Turismo Municipal de Acapulco, en 2023, previo a Otis, se registraron 19,600 visitantes, una cifra que, según el presidente de la Asociación de Hoteles y Empresas Turísticas de Acapulco (AHETA), estuvo cerca de ser igualada en la pasada Semana Santa.
En una entrevista reciente con el periodista Ciro Gómez Leyva, José Luis Smithers declaró que Acapulco ha experimentado una recuperación notable.
“Estamos muy ilusionados. Es una fecha que nos tocó profundamente… Hoy Acapulco está revitalizado, está muy bien. Contamos con casi el 85 o 90 por ciento de las habitaciones disponibles. Gestionamos las operaciones con gran profesionalismo y lealtad hacia nuestros clientes”, afirmó José Luis Smithers.
José Luis enfatizó que Acapulco se encuentra en una mejor situación que antes, pero advirtió que será difícil recuperar el volumen de habitaciones que existía en 2023, ya que dos hoteles no reabrirán tras los daños sufridos por el huracán que alteró el panorama del destino de forma irreversible. Además, reveló que algunos de estos establecimientos han cambiado de propietarios, mientras que otros aún están evaluando si se venderá el inmueble o cuál será su destino, dado que los actuales dueños han decidido no reanudar operaciones.
En octubre de 2023, Acapulco contaba con aproximadamente 300 hoteles. Dos años después, la cifra se sitúa en alrededor de 290, lo que representa una recuperación del 95.71 por ciento en el sector hotelero. Según los datos presentados por José Luis Smithers en octubre de 2025, la región costera del Pacífico dispone de 16,202 habitaciones disponibles en los 290 hoteles operativos en ese momento. Las áreas analizadas por la AHETA de Acapulco incluyeron: Diamante, Dorado y Tradicional.
- Acapulco Diamante registró 4,764 habitaciones ocupadas en octubre de 2023. Actualmente, cuenta con 54 hoteles y una disponibilidad de 4,252 habitaciones.
- Acapulco Dorado tenía una ocupación de 9,951 habitaciones en octubre de 2023. Para 2025, hay 102 hoteles con 7,716 habitaciones disponibles.
- Acapulco Tradicional reportó una ocupación de 4,454 habitaciones en octubre de 2023. Dos años después, en octubre de 2025, hay 104 hoteles con 3,829 habitaciones disponibles.
El dirigente de la AHETA confirmó que todos los hoteles que han reabierto, o que han sido renovados, presentan conceptos y estructuras actualizadas, y las vías públicas también están siendo rehabilitadas. La afirmación de que “Acapulco está mejor que nunca” se relaciona principalmente con las mejoras en las instalaciones hoteleras.
Los viajeros no han olvidado los devastadores efectos de Otis en Acapulco, Guerrero. Un claro ejemplo de la aprensión de los turistas ante la posibilidad de otro huracán se refleja en las estadísticas de ocupación hotelera diaria proporcionadas por la Secretaría de Turismo de Acapulco. Para esta comparación, se toman como referencia el sábado 4 de octubre, fecha en la que El Heraldo de México visitó las playas guerrerenses, y el 21 de octubre, pocos días antes de cumplirse dos años del huracán.
El 4 de octubre, la ocupación total fue del 38 por ciento. La Zona Dorada registró la mayor ocupación con el 46.3 por ciento. La Zona Diamante tuvo un 23.8 por ciento y la Zona Tradicional alcanzó el 41.5 por ciento de ocupación.
Para el 21 de octubre, las cifras experimentaron un descenso en los tres segmentos turísticos. Ese martes, Acapulco presentaba una ocupación del 23.2 por ciento, con la Zona Dorada liderando con solo el 29.4 por ciento, lo que representa una disminución de casi la mitad de los ocupantes. La Zona Diamante registró un 17.2 por ciento de ocupación y la Zona Tradicional reportó un 11.4 por ciento de ocupación hotelera.
