Javier Duarte: ¿Persecución o Rendición de Cuentas? El Argumento de su Defensa
La figura de Javier Duarte, ex Gobernador de Veracruz, continúa generando debate, especialmente tras cumplirse la mayor parte de su condena. Su defensa legal, encabezada por el abogado Pablo Campuzano, ha lanzado una fuerte acusación: la de una persecución política y mediática por parte del Estado mexicano. Lejos de presentarlo como un criminal sin escrúpulos, la estrategia de la defensa busca humanizar su figura y cuestionar la legitimidad de las acciones del gobierno.
El Fin de una Condena y el Inicio de un Nuevo Capítulo
Con más del 95% de su condena cumplida, que oficialmente concluye el próximo 15 de abril, la situación legal de Javier Duarte se encuentra en una etapa crucial. Sin embargo, la defensa argumenta que el proceso no ha terminado verdaderamente, ya que se han buscado imputarle, según sus palabras, más de 300 años en diferentes causas. Este dato subraya la magnitud de las acusaciones que han rodeado al exmandatario y el esfuerzo de la fiscalía por mantenerlo bajo escrutinio.
La Perspectiva de la Defensa: Un “Monstruo” Fabricado
El abogado Pablo Campuzano ha sido enfático al desmentir la narrativa que, según él, ha construido el Estado. Las declaraciones de Campuzano sugieren que la imagen pública de Javier Duarte ha sido deliberadamente distorsionada, presentándolo como un “monstruo” o un “degenerado”, cuando la realidad, desde su perspectiva, es distinta. Esta táctica busca apelar a la empatía y a la duda razonable por parte del público y, potencialmente, de las instancias judiciales.
Acusaciones de Persecución por Parte del Estado Mexicano
La piedra angular de la defensa de Javier Duarte reside en la acusación de persecución por parte del Estado mexicano. Campuzano reprocha la actuación de la Fiscalía General de la República (FGR) en las audiencias, insinuando que se ha buscado prolongar el castigo más allá de lo justo y necesario. La estrategia parece centrarse en demostrar que Duarte ha sido víctima de un proceso desproporcionado, exacerbado por intereses políticos o mediáticos.
¿Javier Duarte: Víctima o Culpable? El Debate Continúa
El caso de Javier Duarte encapsula una compleja discusión sobre la justicia, la rendición de cuentas y el papel de las instituciones. Mientras la sociedad en general demanda justicia para los presuntos delitos cometidos, la defensa opta por un discurso que pone en tela de juicio la equidad del proceso. Las próximas etapas legales, así como la forma en que se gestione la percepción pública, serán determinantes en el desenlace de este mediático caso.

