Mike G. Counahan: El Heliograbado y la Poesía Visual Desde el Corazón de Coyoacán
En un mundo dominado por la inmediatez digital, donde las imágenes se crean y desechan con la misma rapidez, existe un santuario para la paciencia y la maestría. El taller de Mike G. Counahan, ubicado en el vibrante Pedregal de Santo Domingo, en Coyoacán, es uno de esos lugares. Aquí, la fotografía no es solo un acto de capturar un instante, sino un meticuloso proceso que evoca la era dorada de las artes visuales. Counahan, nacido en la Ciudad de México en 1976, se ha erigido como un guardián de técnicas fotográficas que muchos creían olvidadas, fusionando la precisión del siglo XIX con una sensibilidad poética contemporánea.
El Arte del Heliograbado: Un Legado Decimonónico Revivido
El heliograbado, también conocido como grabado al rayón o grabado en hueco, es una técnica de impresión calcográfica que se remonta al siglo XIX. Su complejidad y la calidad excepcional de sus resultados la convirtieron en el método predilecto para la reproducción de obras de arte y fotografías detalladas antes de la llegada de la litografía offset. Hoy en día, son muy pocos los talleres en el mundo que aún dominan y practican el heliograbado, y el de Counahan es uno de ellos.
Este artista visual no solo se limita a la reproducción, sino que infunde a cada obra un carácter único, trabajando con placas de cobre y procesos químicos que exigen una profunda comprensión y un pulso firme. Al igual que los exploradores del siglo XIX que documentaban el mundo con cámaras pesadas y cuadernos de notas, Counahan une la fotografía con la escritura, creando un diálogo entre lo visual y lo literario. “Trabajar con técnicas antiguas es volver a los principios de la fotografía”, afirma Counahan, destacando la importancia de entender el medio en su esencia más pura.
De Santo Domingo a San Miguel Chapultepec: Un Taller en Movimiento
Actualmente, el taller de Mike G. Counahan se encuentra en Pedregal de Santo Domingo, un rincón de Coyoacán que respira arte y tradición. Sin embargo, este espacio, testigo de innumerables impresiones y creaciones, pronto emprenderá un nuevo capítulo. El artista planea trasladar su estudio a la colonia San Miguel Chapultepec, un cambio que promete abrir nuevas avenidas para su práctica artística y su difusión.
Este movimiento estratégico no solo permitirá a Counahan expandir sus operaciones, sino también acercar su fascinante trabajo a un público más amplio y a un entorno artístico dinámico. La esencia del heliograbado y la visión poética de Counahan encontrarán un nuevo hogar, listos para seguir cautivando a los amantes de la fotografía y el arte.
La Poesía como Motor Creativo: Counahan y la Influencia Literaria
Para Mike G. Counahan, la fotografía es un lenguaje que se nutre de la palabra escrita. La influencia de la literatura, y en particular de la poesía, es un pilar fundamental en su proceso creativo. “Creo que los artistas que más admiro siempre serán los escritores. Los poetas”, confiesa, revelando la profunda conexión que establece entre la imagen y el verso.
Esta visión se traduce en obras que trascienden la mera representación visual para evocar atmósferas, narrativas y emociones. Sus heliograbados no solo capturan la luz y la forma, sino que también dialogan con la cadencia de un poema, la fuerza de una metáfora o la melancolía de una estrofa. La fusión de la técnica decimonónica con la sensibilidad literaria crea piezas de arte que invitan a la contemplación y a la reflexión profunda.
El trabajo de Mike G. Counahan es un testimonio de la pervivencia de las técnicas artesanales y de la importancia de mantener vivo el legado de la fotografía. Su dedication al heliograbado, combinada con su profunda apreciación por la literatura, lo consolida como una figura única en el panorama artístico contemporáneo, invitándonos a redescubrir la belleza en la paciencia, la maestría y la poderosa conexión entre la imagen y la palabra.

