El mandatario estadounidense Donald Trump anunció el sábado su intención de incrementar en un 10% los impuestos de importación aplicados a productos de Canadá, como respuesta a un comercial televisivo emitido por la provincia de Ontario, el cual, según él, tergiversaba su postura.
Dicho comercial empleaba declaraciones del expresidente Ronald Reagan para censurar las tarifas impuestas por Estados Unidos, provocando la molestia de Trump, quien declaró el fin de las conversaciones comerciales con el país vecino. El líder de Ontario, Doug Ford, expresó que el anuncio sería retirado tras el fin de semana, a pesar de que su difusión se produjo el viernes por la noche, durante la transmisión del primer partido de la Serie Mundial.
“Su anuncio debía ser retirado INMEDIATAMENTE, pero lo dejaron correr anoche durante la Serie Mundial, sabiendo que era un FRAUDE”, difundió Trump a través de su plataforma Truth Social mientras viajaba a Malasia.
“Dada su flagrante manipulación de los hechos y su acción hostil, elevo el arancel a Canadá en un 10% adicional sobre lo que ya pagan”.
Por el momento, no se ha especificado la fecha de entrada en vigor de este aumento del 10% ni si afectará a la totalidad de las mercancías canadienses.
Impacto de la respuesta estadounidense en Canadá
La economía canadiense se vio seriamente afectada por las medidas arancelarias de Trump, y el primer ministro del país, Mark Carney, ha buscado negociar con el mandatario estadounidense para su reducción. Más del 75% de las exportaciones canadienses tienen como destino Estados Unidos, y la frontera registra un flujo diario de casi 3.600 millones de dólares canadienses (equivalentes a 2.700 millones de dólares estadounidenses) en bienes y servicios.
Numerosos productos canadienses han sido objeto de un gravamen del 35%, mientras que el acero y el aluminio enfrentan un 50%. Los productos energéticos soportan una tasa menor, del 10%, y otras mercancías cubiertas por el tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá están exentas. Se anticipa una próxima revisión de dicho acuerdo. Trump gestionó el pacto durante su primer mandato, pero posteriormente ha mostrado una disminución en su interés por el mismo.
Trump y el primer ministro canadiense Mark Carney participarán en la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático en Malasia. No obstante, el presidente estadounidense declaró a la prensa que viajaba con él que no tenía previsto reunirse con su homólogo canadiense.
Trump afirmó que el anuncio distorsiona la postura de Reagan, un presidente que completó dos mandatos y que es recordado con aprecio dentro del Partido Republicano. Sin embargo, el difunto mandatario se mostró escéptico respecto a los aranceles y dedicó gran parte de un discurso de 1987, utilizado en el anuncio de Ontario, a argumentar en contra de estas imposiciones fiscales.
Trump ha expresado su preocupación de que el anuncio tenga como objetivo influir en la Corte Suprema de Estados Unidos previo a las argumentaciones programadas para el próximo mes, las cuales determinarán si el mandatario posee la facultad de implementar sus aranceles generalizados, una pieza central de su política económica.
