Durante su primer año de mandato, el equipo de Seguridad reportó la confiscación de más de 98 millones de litros de combustibles en 26 regiones del país, bajo la dirección de la presidenta Claudia Sheinbaum.
Un decomiso notable incluyó 10 millones de litros de diésel en Tampico, Tamaulipas. Las investigaciones posteriores resultaron en el arresto de 15 individuos en Ciudad de México, Nuevo León, Tamaulipas y Veracruz, incluyendo empresarios y funcionarios públicos implicados en el tráfico ilegal de carburantes. La aplicación de estrategias de inteligencia permitió detectar organizaciones criminales que operaban con documentación falsa y la complicidad de empresas de transporte, información que fortaleció los expedientes para procesar a todos los involucrados.
Cerca de 2 mil perforaciones ilegales puestas fuera de servicio
Adicionalmente, se localizaron y desmantelaron 1,938 perforaciones ilegales, creadas por grupos criminales utilizando métodos precarios para sustraer hidrocarburos de manera ilícita, representando un peligro para las comunidades cercanas. Se subraya que la intensificación de la vigilancia y la seguridad a nivel nacional ha conducido, en este primer año de gestión, a la incautación de 3,080 tanques, 1,656 camiones cisterna, 1,433 bidones y 129 vagones cisterna, entre otros equipos empleados para la extracción y distribución clandestina.
En el contexto de la lucha contra el robo de combustibles, el Gobierno de la República, a través del Gabinete de Seguridad, amplificó las medidas adoptadas por la administración anterior. El propósito es salvaguardar la seguridad energética y la estabilidad económica del país, aplicando una política de tolerancia cero hacia la corrupción y la impunidad.
Esta iniciativa gubernamental, que debilita una de las fuentes principales de financiación para el crimen organizado, se estructura en cuatro pilares clave: la prevención del robo, movimiento, almacenamiento y venta irregular de hidrocarburos; la utilización de inteligencia estratégica para identificar y desmantelar organizaciones delictivas; la colaboración operativa entre fuerzas federales y autoridades locales; y la consecución de acciones legales efectivas contra los responsables.
El mercado no autorizado de hidrocarburos representa un ilícito de graves consecuencias y un detrimento económico para la nación, por lo que se intensificaron las operaciones destinadas a desbaratar a los grupos dedicados al hurto y la venta ilegal de estos productos energéticos.

