El padre de Emmanuel Haro, un lactante de 7 meses cuyo cuerpo fue encontrado en California, admitió su culpabilidad en una audiencia celebrada este mes de octubre. El menor había sido declarado desaparecido por su propia familia, y una prueba crucial confirmó que ellos fueron responsables de su muerte.
Este jueves, Jake Haro, de 32 años, compareció ante un tribunal por cargos de causar lesiones corporales que resultaron en la muerte del niño, así como por presentar un reporte falso a la policía. Inicialmente, él y su esposa, Rebecca Haro, de 41 años, se habían declarado inocentes.
La sentencia está programada para el próximo 3 de noviembre, mientras que su esposa mantiene su inocencia respecto a todas las acusaciones, incluida la de homicidio.
La pareja fue detenida el 14 de agosto de 2025, tras surgir indicios de que el infante estaba fallecido. Ellos mismos habían reportado su desaparición, alegando un secuestro ocurrido en el aparcamiento de un comercio en Yucaipa. La ausencia de pruebas que respaldaran la versión de Emmanuel cambió drásticamente la situación, llevando a su actual detención.
En su declaración a las autoridades, la madre relató que le arrebataron al bebé mientras le cambiaba el pañal, afirmando que un desconocido la agredió físicamente para sustraer a su hijo de apenas 7 meses.
Las inconsistencias en su relato llevaron a la detención de la pareja por la policía estadounidense

La policía comunicó en un reporte de avances sobre el caso haber detectado “inconsistencias” en la narración de la madre sobre la desaparición del niño, tras interrogar a testigos potenciales, a los padres y examinar evidencias como el vehículo y algunas lesiones reportadas por ellos.
“Los investigadores interrogaron a diversas personas, incluyendo a los padres de Emmanuel, Jake y Rebecca Haro. Durante estas entrevistas, Rebecca presentó inconsistencias en su declaración inicial y optó por no continuar. En esta fase de la investigación, los investigadores no pueden descartar la posibilidad de un crimen en la desaparición de Emmanuel”, señala el comunicado.
Al parecer, la pareja se refería a su hijo utilizando el tiempo verbal pasado, lo que generó sospechas sobre su forma de hablar del menor y la aparente falta de preocupación.

