Las autoridades federales mexicanas han puesto en marcha, a través de la Secretaría de la Defensa Nacional, tres puntos de coordinación en el estado de Hidalgo. Estos puntos se apoyan en 111 rutas aéreas, utilizando 21 helicópteros, de los cuales 14 pertenecen a la Defensa y siete a otras agencias. La sede principal se ha establecido en el aeródromo de Pachuca, complementada por dos centros logísticos de avanzada en Zimapán y Zacualtipán. Estos centros tienen la capacidad de movilizar diariamente 4 mil 872 paquetes de ayuda alimentaria, beneficiando a 19 mil 488 personas afectadas por las precipitaciones.
Los centros logísticos de avanzada recibirán las provisiones mediante camiones de carga para su posterior distribución aérea a las áreas de difícil acceso. Este método busca agilizar la entrega ante la imposibilidad de transitar por las vías terrestres bloqueadas.
Durante la conferencia de prensa matutina denominada “La mañanera del pueblo”, la jefa de Estado de México, Claudia Sheinbaum Pardo, enfatizó la relevancia de la implementación de estos centros de mando para brindar asistencia a la población damnificada por las lluvias.
El titular de la Defensa Nacional, general Ricardo Trevilla Trejo, comunicó que, siguiendo las directrices de la Presidenta, se trasladó a Hidalgo para supervisar el establecimiento de los tres centros de coordinación. Una base principal, equipada con 10 helicópteros, asiste a 57 comunidades. Las dos bases logísticas avanzadas, una en Zimapán con cinco helicópteros para 28 comunidades y otra en Zacualtipán con seis helicópteros para 26 comunidades, complementan la operación.
Destacó que esta operación, iniciada el 14 de octubre, permite el traslado de víveres, agua y medicamentos, así como el transporte de personas que requieren atención médica especializada. Estos vuelos también facilitan la recopilación de información sobre los caminos aún incomunicados, datos que se comparten con la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) y con los equipos encargados de despejar las rutas con maquinaria pesada.
