Un reciente estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) expone una alarmante realidad: aproximadamente 840 millones de mujeres a nivel global, lo que representa casi un tercio de la población femenina, han sido víctimas de agresiones íntimas o de índole sexual a lo largo de sus vidas. Esta estadística se ha mantenido prácticamente invariable desde el inicio del milenio.
Por primera vez, este análisis de la OMS desglosa las cifras relativas a la violencia sexual ejercida por individuos ajenos a una relación de pareja. Se estima que 263 millones de mujeres, con edades a partir de los 15 años, experimentaron agresiones sexuales por parte de personas sin las que no mantenían vínculos románticos.
“La brutalidad contra las mujeres constituye una de las afrentas más arraigadas y extendidas de la historia humana, y lamentablemente, sigue siendo una de las que menos se abordan”, declaró Tedros Adhanom Ghebreyesus, máximo dirigente de este organismo de las Naciones Unidas, a través de un comunicado.
En el transcurso del último año, 316 millones de mujeres, un 11% del total de mayores de 15 años, sufrieron maltrato físico o sexual a manos de su pareja, según se desprende del informe.
La OMS enfatizó que el avance en la erradicación de esta problemática ha sido “desesperantemente lento”, apuntando que la violencia en el ámbito de pareja solo ha experimentado un descenso mínimo del 0.2% anual durante las últimas dos décadas.
LynnMarie Sardinha, del departamento de salud sexual, reproductiva, materna, infantil y adolescente y envejecimiento de la OMS, advirtió sobre la posibilidad de un incremento en el registro de casos.
Paralelamente, en Italia, los legisladores han dado luz verde a una ampliación de la definición de violencia sexual, que ahora contemplará los actos carentes de consentimiento. Este avance se ha logrado gracias a una inusual cooperación entre la mayoría de la derecha radical y la oposición de centroizquierda.
El partido Fratelli d’Italia, liderado por la presidenta del gobierno Giorgia Meloni, y el Partido Democrático de centroizquierda de Elly Schlein, unieron sus votos para modificar el código penal.

